Sada

Esta mañana a eso de las 11 me llama Juan y me dice: ¿Que haces en casa? Viste que día mas bueno. ¿Vamos hasta Sada navegando? Media hora mas tarde ya estábamos navegando, y al final hicimos casi 22 millas.
Una imagen de la ría de Sada navegando al través de La Torrella

En esta imagen a las 12:45 estamos a la altura de Lorbé
Entrando en el Puerto de Sada
Después de cargar Gas-oil dejamos el Kaipirinha en la cabecera de un pantalán y nos fuimos a comer, no sin antes dar una vuelta por las tiendas náuticas del puerto.
Después de la "siesta" y de dar un paseo alrededor del Marvan, el 49i de nuestro amigo Manolo, salimos del puerto para jugar un rato con la central de navegación, principalmente con el radar, pues Juan quería ver somo se superponía la imagen del radar sobre la carta en el ploter.
A eso de las 19:20 mientras la puesta de sol se veía sobre La Torre de Hércules estábamos a la altura de Canabal, entrando en puerto casi de noche.

Un día de navegación precioso al que solo le faltó un poco mas de viento.

El Kaipirinha en la ensenada de Riazor

Esta tarde hicimos un recorrido de mas de 12 millas, la mayor parte del recorrido navegando a vela.

A eso de las 16:30, después de comer y de pasar la mañana en La Casa del Agua, salimos a dar un paseo en el Kaipirinha.

Estuvo una tarde preciosa con el mar tranquilo y apenas viento, salimos a motor hasta la punta de Dique y allí largamos el génova, la mayor ya la habíamos largado a la altura del Castillo de San Antón.

Navegamos con un viento inestable del primer cuadrante, rolando entre el norte y el este y con una intensidad de 5, que por momentos llegó a los 15 nudos.

Llegamos navegando solo a vela hasta Punta Herminia, donde ante el riesgo de mareo pues había caído de nuevo el viento, retiramos el génova y continuamos el recorrido a motor.

En esta foto vemos al fondo a,

La Torre de Hércules, Patrimonio de la Humanidad.

Entramos hasta la ensenada de Riazor-Orzan, aquí vemos de frente el edificio "Mediodía".

En la proa a estribor, podemos ver el malecón que separa las playas de Riazor y Orzán.

Ya de vuelta de nuestro paseo aquí vemos a Nestor relajado al "reparo" de la capota anti-rociones, saliendo de la ensenada de Riazor, para regresar al puerto de A Coruña.

A la altura de los bajos de La Torre y ya en la enfilación de los Faros de Mera volvió a subir el viento, rolando a leste.

Largamos de nuevo velas y así navegamos hasta el Dique donde nos volvió a caer de intensidad.

Un día muy aprovechado.