domingo, 22 de abril de 2007

Mi hijo Pedro Javier y su mujer Ángeles conocen el Kaipirinha

El Sábado día 21 Ángeles y Javi conocen el barco.

Comemos a bordo y por la tarde salimos a disfrutar del placer de la navegación por la ría de Arosa.

Eran las doce de la

mañana cuando llegaron al CN Caramiñal y era casi de noche cuando se fueron.

Un día bonito J aunque no pescamos ni una “xarda”

lunes, 9 de abril de 2007

Transporte de 1000 millas Palma => Puebla


28/03/07

Llegan a Palma 4 tripulantes para transportar el

barco, yo ya llevaba allí dos días preparando el barco y los víveres para el transporte, así como 6 garrafas de gas-oil de reserva que estaban llenas y atadas en la jupete, esa noche salimos a

cenar y a tomar unas copas con unas amigas de uno de los tripulantes

29/03/07

Salimos de Palma a la 0400 de la mañana navegamos toda la noche parte del tiempo solo a vela, a medio día estábamos llegando a Ibiza, mi pretensión pasar entre Ibiza y Formentera, pero Pepe me dice que si diéramos rumbo al sur de Formentera iríamos mejor, viendo que esa propuesta tenía ya consenso y teniendo en cuenta que yo lo que quería era transportar el barco, dije amén. Con olas de dos metros y viento de unos 35 nudos tardamos en

pasar Formentera :-) "ni se sabe".

Esa tarde noche Carlos y Felipe se pedían la vez para devolver, en un momento dado después de

estar un

rato comprobando porque nos fallaba el piloto automático, salí pidiendo turno para devolver, pero en eso mientras me lo pensaba me sacaron el turno diciendo "o vas tu o voy yo" y ya se me colaron delante. Solo Pepe aguantó sin tomar nada y sin devolver, dos no devolvimos gracias a la biodramina y otros dos "engadaron".

30/03/07

Después de 30 horas de navegación y unas 200 millas recorridas llegamos al puerto de Alicante a las 9 de la mañana, donde pasamos el día, comiendo y cenando como señores.

31/03/07

A las 5 de la mañana llegan abordo los más rezagados, a alguno que no voy a nombrar hubo que ir a buscarlo a algún garito, largamos amarras con la tripulación hecha polvo, las copas son malas al día siguiente, navegamos bien todo el día, aunque con viento de proa, de hecho menos la primera noche fue todo el camino con viento de proa.

01/04/07

En la primera guardia de la noche con el viento y mar que hacía Carlos me dice de entrar en Carboneras a lo que le respondo que aunque no está agradable si está navegable y que prefería entrar por la mañana en Almerimar, y así lo hicimos después de 29 horas y unas 200 millas recorridas.

Después de ducharnos en tierra, cargar gasoil y de desayunar, salimos rumbo al estrecho, medimos a continuación después de salir unas rachas de viento con nuestro anemómetro (estaba optimizado J ) de 52 nudos, por lo que decidí dar la vuelta.

Cuando nos ven entrar de nuevo nos dice el capitán de puerto que para hoy las previsiones son buenas que “cuando viene malo es mañana”. Por lo que ante eso y por consenso decidimos salir de nuevo; serían aproximadamente las 12 de la mañana.

02/04/07

Después de navegar todo el día 1 la noche del 2 y casi todo el día llegamos al estrecho que pasamos con la marea sin mayor problema, aunque seguíamos con el viendo de proa, seguimos rumbo al oeste unas 20 millas cambiando a continuación al nw rumbo a Lagos.

03/04/07

Después de 350 millas y de más de 2 días ½ de navegación amaneciendo el día 3 entramos en Lagos y quedamos en pantalón de espera, pasamos el día y la noche.

04/04/07

“Alguien” se enamoró perdidamente de unos ojos en la noche de Lagos.

Cuando llegaron al barco a eso de las cinco de la mañana, arrancaron motor, por lo que ya me ves a mi a toda velocidad vistiéndome para hacer la maniobra de desatraque, a los diez minutos ya no quedaba nadie sobre cubierta, Carlos y Felipe, cada uno durmiendo en su camarote y Pepe dormitando en el salón.

A eso de las 11 de la mañana, ciñendo con motor y mayor rizada, con unos 35 nudos de viento y olas de 5 metros, se asoma Felipe por la puerta de la camareta y dice:

“Vesiño con este mar e este vento o MARMARÍ (su barco) andaría a 3 nudos e ½”

A lo que yo le respondo:

- Y te quejas si vamos con el Kaipirinha a 4 ½ nudos.

A lo que contesta

- Con el MARMARÍ iríamos a 3 ½ nudos, pero marcha atrás.

A medía tarde Felipe y Carlos deciden, que en aquellas condiciones de mar y viento ellos no navegan, intentando convencerme de que no siguiera, por lo que arrumbamos a Sines y ellos preparan la logística para que un amigo de Felipe que estaba trabajando en Lisboa les viniera a buscar, para llevarles hasta Oporto donde tenían el coche de Luz, una amiga que había ido a pasar el fin de semana con su pareja. Al llegar cargamos gas-oil y nos adjudican un punto de amarre que con el viento que había, no era fácil atracar, al final lo dejamos en otro de enfrente también libre y listo.

Después de unas 14 horas de navegación entramos en Sines, donde tomamos un arroz tamboril, los 3 que quedábamos, de los mejores arroces de nuestra vida.

05/04/07

A eso de las 5 de la mañana largamos amarras y con mucha menos mar y viento remontamos a motor la costa sur de Portugal, a la altura de Setúbal y hasta pasado el cabo Raso después de Cascais conseguimos navegar a vela en ceñida y con buena velocidad, anochecía cuando pasamos Roca.

06/04/07

Para evitar aparejos tan frecuentes en la costa portuguesa damos rumbo al w de las Islas Berlengas por donde pasamos a las 4 1/2 de la mañana, pongo rumbo al Puerto de Leixoes y a esa hora desperté a Pepe para que me relevara en la guardia. Pasamos el día navegando bien y sin mucha mar y dando buena cuenta del pata negra que embarcamos en Palma, al cual no le sentó bien el viaje, pues llegó a Galicia en los huesos.

07/04/07

Navegando a la altura de Oporto y a unas 15 millas de tierra de repente nos alumbra y reflector, eran los “guardiñas” la policía fiscal y de fronteras portuguesa, después de un interrogatorio por la radio, de donde veníamos a donde íbamos, nombre y edad de los tripulantes etc etc. Se despidieron deseándonos buena navegación a lo que respondimos “buena guardia y buenas noches” Ese sábado por la mañana entrábamos en Baiona para vaciar el tanque de kk que se había atascado.

Eran las siete de la tarde cuando atracábamos en Puebla, detrás quedaban mas de mil millas de navegación con el viento en la proa, nuestro destino final, y nuevo punto de amarre del Kaipirinha